El catarismo fue un movimiento
religioso que afirmaba la existencia de una dualidad creadora, Dios y
Satanás. Este movimiento se asentó en las tierras del mediodía
Francés. La ruta de los cátaros nos llevará por los caminos que
estos siguieron durante su migración en su exilio de Francia. En
esta ruta podemos contemplar los vestigios de la historia medieval y
del catarismo.
La ruta comienza
en Lérida, desde donde nos desplazaremos a Solsona para visitar el
Cementerio Modernista de Sant Esteve d’Olius, que nos mostrará su
bella cabecera y juegos de formas. Una vez lleguemos a Solsona, la
Catedral será nuestra siguiente parada obligatoria. En ella se unen
los estilos románico, gótico y barroco, además del Museo
Diocesano.
La siguiente ciudad a la que nos
desplazaremos será Ripoll, cuña de Cataluña. En esta bella ciudad
visitaremos el Monasterio de Santa María de Ripoll y su
extraordinario pórtico. Tras esta breve visita, nos podemos escapar
a Berga, donde nos encontraremos con un maravilloso centro histórico
y varios edificios medievales. Visita imprescindible: el Santuario de
Queralt, desde podemos apreciar toda la comarca.
Otras visitas recomendadas son la
iglesia de Sant Quirze de Pedret y el Museo de las Minas de Cercs. Al
terminar, podemos acercarnos a Bellver de Cerdanya, en el que también
encontramos un interesante barrio antiguo, con edificios de piedra y
una preciosa plaza mayor. Nuestra última visita será a Bagá, un
pueblo medieval que se caracteriza por albergar el Centro Medieval y
del Catarismo. Aquí podremos conocer un poco más sobre la historia
de los Cátaros.